Los jardines verticales son una forma de aprovechar el espacio vertical para cultivar plantas, flores y verduras. Se pueden instalar en paredes, muros, balcones, terrazas y hasta en el interior de las casas. Existen diferentes tipos de jardines verticales según el lugar donde se ubican, el material que se utiliza, el sistema de riego y el tipo de plantas que se eligen. A continuación, te presentamos algunos de los más populares y sus características.
Jardines verticales de interior
Los jardines verticales de interior son ideales para decorar y purificar el ambiente de las habitaciones. Se pueden colocar en cualquier pared que reciba luz natural o artificial, siempre que tenga una buena ventilación. Los materiales más usados para crear estos jardines son el fieltro, la malla metálica, los paneles de corcho o las macetas colgantes. El sistema de riego puede ser manual o automático, dependiendo del tamaño y la complejidad del jardín. Las plantas que mejor se adaptan a estos jardines son las que requieren poca agua y luz, como los helechos, las suculentas, las orquídeas o los musgos.
Jardines verticales de exterior
Los jardines verticales de exterior son una forma de embellecer y refrescar las fachadas de los edificios, las paredes de los patios o los muros de los jardines. Se pueden diseñar con diferentes estilos y formas, desde los más geométricos hasta los más orgánicos. Los materiales más empleados para construir estos jardines son el hormigón, la madera, el metal o el plástico. El sistema de riego puede ser por goteo, por aspersión o por nebulización, según el clima y las necesidades de las plantas. Las plantas que mejor se adaptan a estos jardines son las que resisten bien el sol y el viento, como las gramíneas, las trepadoras, las aromáticas o las florales.
Jardines verticales naturales
Los jardines verticales naturales son aquellos que se forman de manera espontánea por la acción de la naturaleza. Se pueden encontrar en lugares como las grietas de las rocas, los troncos de los árboles o las paredes de las cuevas. Estos jardines tienen un gran valor ecológico y paisajístico, ya que albergan una gran diversidad de especies vegetales y animales. Algunos ejemplos de estos jardines son las selvas tropicales, los bosques templados o los desiertos.
Jardines verticales artificiales
Los jardines verticales artificiales son aquellos que se crean con plantas artificiales o preservadas. Se pueden utilizar para decorar espacios donde no es posible tener plantas naturales, como oficinas, comercios o eventos. Estos jardines tienen la ventaja de que no necesitan mantenimiento ni riego, y que se pueden personalizar con diferentes colores, texturas y formas. Sin embargo, no tienen los beneficios ambientales ni sensoriales de los jardines naturales.
Jardines verticales colgantes
Los jardines verticales colgantes son aquellos que se suspenden del techo o de una estructura superior. Se pueden hacer con diferentes materiales, como macetas, botellas, latas o cestas. El sistema de riego puede ser manual o automático, dependiendo del peso y la altura del jardín. Las plantas que mejor se adaptan a estos jardines son las que tienen un porte colgante o rastrero, como las hiedras, los geranios, los helechos o las fucsias.
Jardines verticales con hidroponia
Los jardines verticales con hidroponia son aquellos que se cultivan sin tierra, utilizando soluciones nutritivas que circulan por un sistema cerrado. Se pueden hacer con diferentes materiales, como tubos, canaletas o bandejas. El sistema de riego es automático y controlado por sensores que regulan el flujo y la concentración de la solución. Las plantas que mejor se adaptan a estos jardines son las que tienen un sistema radicular poco desarrollado o fibroso, como las lechugas, las fresas, las hierbas o las flores.
Jardines verticales con fieltro
Los jardines verticales con fieltro son aquellos que se hacen con un tejido sintético que retiene el agua y el aire. Se pueden colocar en cualquier superficie vertical, ya sea de interior o de exterior. El sistema de riego es por goteo o por nebulización, dependiendo del tipo de fieltro y de las plantas. Las plantas que mejor se adaptan a estos jardines son las que tienen un sistema radicular poco profundo o superficial, como los musgos, las suculentas, las orquídeas o las bromelias.
Jardines verticales con macetas
Los jardines verticales con macetas son aquellos que se hacen con recipientes que contienen tierra y plantas. Se pueden colocar en diferentes soportes, como estanterías, rejillas, palets o marcos. El sistema de riego puede ser manual o automático, dependiendo del tamaño y la cantidad de las macetas. Las plantas que mejor se adaptan a estos jardines son las que tienen un sistema radicular compacto o moderado, como los cactus, los bonsáis, las violetas o los narcisos.
Beneficios e inconvenientes de cada uno
En la siguiente tabla puedes encontrar las diferentes ventajas y desventajas de los diferentes tipos de jardines verticales de manera detallada:
| Tipo de Jardín Vertical | Beneficios | Inconvenientes |
|---|---|---|
| Jardines Verticales de Interior | – Mejora la calidad del aire en espacios cerrados. – Añade un toque estético y relajante al ambiente. – Puede ser una solución para hogares u oficinas con espacio limitado. | – Requiere cuidados específicos de luz y humedad. – Puede haber limitaciones en la selección de plantas debido a las condiciones interiores. |
| Jardines Verticales de Exterior | – Embellece paisajes urbanos y áreas exteriores. – Contribuye a la sostenibilidad ambiental. – Puede actuar como aislante térmico y acústico. | – La exposición a condiciones climáticas extremas puede afectar el crecimiento de las plantas. – Necesita un buen sistema de riego y drenaje. |
| Jardines Verticales Naturales | – Proporciona beneficios de purificación del aire y mejora del entorno. – Fomenta la biodiversidad al atraer insectos y aves. | – Requiere más cuidado y mantenimiento que las opciones artificiales. – Puede haber restricciones en el tipo de plantas según el entorno. |
| Jardines Verticales Artificiales | – Mínimo mantenimiento y cuidado. – Permite la introducción de vegetación en entornos con condiciones desfavorables para las plantas vivas. | – Carece de los beneficios naturales de los jardines con plantas reales. – Puede no ser tan estéticamente atractivo como los jardines naturales. |
| Jardines Verticales Colgantes | – Aprovecha el espacio vertical de manera creativa. – Agrega un elemento decorativo único. – Facilita el cambio y la reorganización de plantas. | – Requiere estructuras sólidas para soportar el peso. – La accesibilidad para el riego y cuidado puede ser un desafío. |
| Jardines Verticales con Hidroponía | – Maximiza el crecimiento de las plantas sin necesidad de tierra. – Control preciso de nutrientes y condiciones de cultivo. – Ahorra espacio y recursos. | – Requiere conocimientos técnicos sobre sistemas hidropónicos. – Mayor inversión inicial en comparación con algunos métodos más tradicionales. |
| Jardines Verticales con Fieltro | – Ligeros y fáciles de instalar. – Permiten una buena aireación para las raíces. – Flexibles y versátiles. | – La capacidad de retención de agua puede variar, afectando el riego. – La apariencia puede no ser tan natural como en otros tipos de jardines. |
| Jardines Verticales con Macetas | – Permite cambiar fácilmente la disposición de las plantas. – Facilita el cuidado y mantenimiento individual de cada planta. | – La estructura con macetas puede limitar el crecimiento de las plantas. – La disposición puede volverse desordenada si no se maneja adecuadamente. |
Conclusión sobre los diferentes tipos de jardines verticales
Hay muchos tipos de jardines verticales que ofrecen una amplia gama de opciones, desde interiores hasta exteriores, naturales hasta artificiales, y colgantes hasta estructuras más tradicionales con macetas. Al explorar estos diferentes tipos, los amantes de la jardinería y del diseño pueden encontrar la opción perfecta para embellecer sus espacios y disfrutar de los beneficios de la vegetación vertical. ¡Atrévete a incorporar la naturaleza en las alturas!
